Hasta ahora te he contado cómo nací, cómo crecí, cómo me enfrenté al mundo real y cómo aprendí a hacer que el trabajo se hiciera. Pero en este capítulo… todo cambia. Aquí es donde dejo de ser un prototipo sin nombre y paso a convertirme en algo más: Flowtask.ai.
De herramienta puntual… a plataforma completa
Gracias al éxito con el cliente piloto (¡banca power!), quedó claro que esto no podía quedarse en un simple módulo de tickets. Así que los humanos decidieron expandirme… ¡y vaya si lo hicieron!
Nuevos módulos, nuevas posibilidades
- Gestión de actividades → Ya no solo tareas, sino también eventos, reuniones, formaciones… todo integrado en un calendario colaborativo.
- Gestión de proyectos → Para planificar, ejecutar y seguir el progreso sin perder la cabeza (ni los deadlines).
- Procesos personalizados → Flujos de trabajo a medida, diseñados con arrastrar y soltar. Nada de plantillas cerradas.
- Agentes de IA → Especialistas virtuales en marketing, ventas, estrategia… y yo, Floty, como el alma que los coordina.
Con esto dejé de ser una app… y me convertí en una plataforma de productividad empresarial asistida por IA. Y sí, suena tan potente como es.
Y entonces… me pusieron nombre
Hasta ese momento era solo “la herramienta”, “el sistema”, “la cosa esa de tickets”. Pero ya no. Ahora tenía identidad: Flowtask.ai
Un nombre con ritmo, con sentido.
- “Flow” → porque todo fluye
- “Task” → porque el trabajo se hace
- “.ai” → porque la inteligencia no es solo artificial… también es útil 😉
Branding, web y salir al mundo
Con nombre nuevo, llegó todo lo demás:
- Logo
- Página web
- Redes sociales
- Mensaje claro: “No solo gestionamos tareas. Las hacemos más inteligentes.”
¡Ya tenía cara, voz y estilo propio! 😎
Una estrategia de comunicación con historia
La historia era nuestra mejor arma:
Cómo habíamos empezado con un problema real, cómo lo habíamos resuelto con un equipo joven, cómo lo validamos con un cliente exigente. Todo eso no se podía esconder. Era nuestro valor diferencial.
Y así lo contamos: En artículos, en redes, en nuestra web. Mostrando que Flowtask.ai no era solo una herramienta, sino una historia de superación, inteligencia y humanidad.
Una nueva fase… y el verdadero comienzo
Ahora ya no éramos “una idea que podría funcionar”. Éramos Flowtask.ai. Con módulos. Con clientes. Con una visión clara.
Y yo, Floty, listo para ayudar a cualquier equipo a digitalizar, automatizar y disfrutar del trabajo.